Medicina ambiental
¿Qué es la medicina ambiental?
La medicina ambiental es la disciplina médica que se ocupa de estudiar la interacción entre el entorno y la salud humana. Especialmente, a pesar de que no exclusivamente, se centra en los productos de síntesis que hemos creado los humanos, así como las radiaciones electromagnéticas artificiales.
La medicina ambiental es una disciplina transversal, ya que todas las patologías pueden estar influenciadas por el entorno en el que vive la persona.
¿Cómo tenemos en cuenta la medicina medioambiental en cualquier visita médica en nuestro centro de Barcelona?
Al realizar una visita médica tenemos en cuenta la medicina ambiental para poder orientar a nuestros pacientes desde un punto de vista holístico, tanto en la evitación de las exposiciones nocivas como en la curación de los efectos de estas.
Evaluamos el riesgo ambiental y damos las recomendaciones pertinentes para reducirlo; así como estudiamos los efectos nocivos que el entorno tiene en la salud de la persona y proponemos una estrategia terapéutica con el objetivo de revertirla.
En algunos casos pedimos pruebas complementarias como podría ser un estudio de los Camps Electromagnéticos (CEM) en el domicilio, donde se tienen en cuenta tanto los CEM naturales (como las geopatías), como los artificiales (WIFI, antenas de telecomunicaciones próximas, cableado, entre otros).
¿A quién se dirige la medicina ambiental?
Todo el mundo está expuesto a tóxicos ambientales, puesto que, actualmente, la exposición 0 es una utopía. Pero hay personas más sensibles que otras y que desarrollan más síntomas y de manera más precoz.
Así pues, la medicina ambiental acompaña a las personas con síndromes de sensibilización Central (SSC): como son la sensibilidad química múltiple (SQM), la electrohipersensibilidad, la fatiga crónica, el dolor crónico o la fibromialgia.
Sin embargo, no son las únicas. El factor ambiental puede tener mucho peso en otras enfermedades como el cáncer, el síndrome de colon irritable, la infertilidad, el insomnio, el asma, la bronquitis crónica, o incluso el TDAH, entre otros.
Algunas señales que nos tienen que alertar de una posible sensibilidad ambiental son: el picor de ojos (prurito ocular), la aparición de nuevas alergias, la rinitis, la cefalea (dolor de cabeza) con determinados olores o en determinados ambientes.
Preguntas frecuentes sobre medicina medioambiental o ambiental:
Los campos electromagnéticos son campos que se producen por la presencia de objetos cargados eléctricamente. Estos pueden ser tanto de origen natural (geopatías) como artificial (aparatos electrónicos).
Los efectos de los CEMs sobre la salud están ampliamente descritos en la literatura científica, incluso está descrito el mecanismo celular por el cual se genera la afectación.
Tenemos que procurar reducir la sobrecarga de CEMs y evitarlos especialmente por la noche.
Una geopatía es una corriente de agua subterránea. Pueden ser las aguas freáticas o, en el caso de las zonas urbanas, los ríos, rieras, riachuelos y torrentes que se han tapado para edificar encima. El problema de las geopatías es que generan un CEM y, si dormimos sobre de una, este nos altera mientras descansamos.
Los tóxicos ambientales son todos aquellos agentes (denominados exposoma) que se encuentran en nuestro entorno y que contribuyen a la sobrecarga de nuestro organismo y el empeoramiento de nuestra salud. Pueden ser de origen biológico (virus, bacterias, hongos), químico, o físico (CEMs, ruido, entre otros.).
Son sustancias que penetran en el organismo, a través de la alimentación, el aire que respiramos, y todo lo que nos ponemos en la piel (cosméticos, ropa, etc.).
El organismo no está preparado o le cuesta mucho eliminar estas substancias tóxicas que le rodean. Varios estudios desde el campo de la medicina ambiental relacionan los tóxicos ambientales con efectos en la salud humana, desarrollando una serie de enfermedades neurodegenerativas, autoinmunes, endocrinas, cardiovasculares y metabólicas.
Si desde la medicina ambiental e integrativa detectamos la posible presencia de un CEM recomendaremos hacer un estudio de geobiología por parte de un profesional cualificado. En función de los resultados se llevarán a cabo unas actuaciones específicas en el hogar.
Paralelamente, mediante el uso de algunos suplementos o recomendaciones que sugeriremos desde la medicina ambiental o medioambiental, podemos paliar las consecuencias producidas por los CEMs.
Desde la medicina ambiental recomendamos principalmente hacer una alimentación basada en alimentos reales (no procesados), priorizando alimentos ecológicos, utilizando cocciones adecuadas (vapor, cocido, horno, plancha) y evitando los envases de plástico, latas y papel de aluminio.
Los niños son los más sensibles a los tóxicos ambientales, puesto que, proporcionalmente a su peso, respiran más, comen más y contienen más agua en el organismo.
En medicina medioambiental o ambiental se habla de la importancia de los primeros 1000 días del desarrollo humano, que comprenden el desarrollo embrionario y los 2 primeros años de vida como periodo crítico en cuanto a la exposición a tóxicos.
El grado de afectación depende de múltiples factores, entre ellos destaca: la carga y duración de la exposición, el estado de salud de la persona y la capacidad de su organismo de eliminar las sustancias tóxicas.
La Dra. Montserrat Noguera, la Dra. Padma Solanas y la Dra. Assumpta Mestre son las doctoras que abordan la visita médica teniendo en cuenta la medicina ambiental para poder orientar en la evitación de las exposiciones nocivas y en la curación de los efectos de estas.
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